El estudio de las cuencas sedimentarias de la Patagonia nos permite conocer la dinámica superficial de la corteza terrestre y sus cambios en el tiempo geológico. Fundamentalmente, aporta a distinguir los procesos geológicos que modelaron el paisaje, tales como el levantamiento de cordones montañosos o inundaciones marinas de escala continental. Estos estudios se complementan con los paleontológicos y aportan a conocer las condiciones paleoambientales y los momentos exactos en donde la biota se habría desarrollado. A su vez, este estudio tiene implicancias desde el punto de vista económico, ya que aporta al estudio de la formación, migración y acumulación de hidrocarburos en subsuelo.
Cuencas sedimentarias Miocenas y Mesozoicas
En esta línea se estudia el relleno 
sedimentario de cuencas formadas durante el Mioceno (23-5 millones de años) y el Cretácico-Jurásico (200-66 millones de años), que se encuentran tanto al pie de la Cordillera de los Andes como en la costa atlántica de la Patagonia. Se intenta reconstruir los ambientes de acumulación de sedimentos y fósiles que éstas contienen. Las cuencas miocenas son potenciales registros del levantamiento de la Cordillera de los Andes y grandes explosiones volcánicas, mientras que las Cuencas Mesozoicas (Cuencas Austral y Neuquina) son productoras de hidrocarburos y su estudio es fundamental para conocer el recurso.
Integrantes:
Dr. José I. Cuitiño
Dr. Andrés Bilmes
Dr. Sebastián Richiano
Lic. Aylén Allende Mosquera
Lic. Nicolás Farroni